En el año 2008, sembramos las raíces de nuestra pasión por las rosas, empezamos con media hectárea de cultivo y vendíamos nuestra producción a intermediarios que se encargaban de exportarla. Sin embargo, en el año 2016, dimos un paso importante hacia la creación de nuestra marca La Rosa de la Alegría, que hoy es sinónimo de calidad y dedicación.
Nuestra producción se enfoca en garantizar la calidad del producto, lo que nos ha permitido lograr el reconocimiento de nuestros distinguidos clientes.